Varias provincias de Andalucía, entre las poblaciones con mayor obesidad y sobrepeso infantil y en adultos de España

Dentro de la celosa vigilancia que las instituciones sanitarias realizan en torno a los niveles de exceso de peso de una población, por las consabidas consecuencias de pérdida de calidad y esperanza de vida y por su condición de puerta de entrada a enfermedades coronarias y mentales (entre otras descompensaciones que incluyen la diabetes o algunos tipos de cáncer), son fundamentales los estudios estadísticos que ayuden a poner el foco en los puntos demográficos con mayor incidencia o prevalencia, para poder así destinar medidas concretas y trazar políticas que corrijan las tendencias particulares en un estado autónomico como el nuestro.

El Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) de Madrid acaba de publicar un informe junto a la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan) del que se pueden extraer varios valores aplicables no sólo a la población adulta, sino también a la infantil y adolescente en todo el territorio nacional.

La conclusión general es que más de la mitad de los ciudadanos mayores de edad pesa más de lo recomendable y que prácticamente dos de cada diez viven con obesidad. Los datos son también preocupantes cuando baja la edad de la muestra, pues un tercio tiene sobrepeso y uno de cada diez es directamente obeso.

El punto de partida fueron los datos recabados en 2020 para el Estudio Nacional de sero-Epidemiología de la infección por SARS-CoV-2 en España, el conocido como Ene-Covid, en el que participaron 57.131 adultos y 10.543 niños y adolescentes de edades comprendidas entre los dos años y los 17.

Una vez madurados y actualizados los datos, el estudio ha terminado arrojando luz sobre esta otra cuestión de interés sanitario. Los resultados no sólo discriminan por edad, sino que también lo hacen por sexo, situación económica y lugar de residencia.

Así, es sencillo conocer en qué punto se encuentra Andalucía dentro de la prevalencia de obesidad y sobrepeso nacionales, y la posición no es precisamente la más envidiable.

Córdoba se alza como la provincia con mayor sobrepeso infantil y adolescente (un 26,6 por ciento de la población de este rango de edad) de todo el territorio nacional y también se sitúa entre las más desmarcadas en el equivalente de adultos, con un 40,2 por ciento. En este sentido, el del exceso de peso en mayores de edad, la provincia con mayor prevalencia es Almería, con un 44,1 por ciento, seguida de León con un 43,8 por ciento y de Huelva, que anota un 41,1 por ciento.

Hay que tener en cuenta que de los cinco estadios que calibran el sobrepeso de una población adulta, el máximo nivel y que por tanto debería despertar una acción social e institucional es aquel que queda por encima del 45,55 por ciento. Que tres de las ocho provincias se muevan en el margen inmediatamente inferior es una llamada de atención clara, sobre todo si se tiene en consideración que en lo que respecta a la obesidad infantil el porcentaje de población crítico es el que excede el 25,30 por ciento. Córdoba pasa el umbral holgadamente con un 26,6 por ciento.

Aunque el acento suele ponerse en la obesidad, el sobrepeso también está considerado como una amenaza a la salud pública. Según la OMS, un peso normal en personas adultas es el que va aparejado a un Índice de Masa Corporal (IMC) de entre 18,5 y 25 kg/m2. Entre 25 y 30 kg/m2 se consideraría sobrepeso y en casos iguales o superiores a 30 kg/m2, entraríamos en el terreno de la obesidad, que sería severa si se alcanzan o rebasan los 35 kg/m2.

Si hablamos del segundo bloque, el estudio científico vuelve a poner 'en rojo' los datos andaluces. Huelva es la provincia con el récord de prevalencia de obesidad en la población infantil y adolescente con un 21,6 por ciento. Este dato es bastante significativo si se confronta con el del resto del territorio andaluz, que tiene un promedio de 13,28% e incluye ejemplos concretos que llega casi a duplicar (como el 10,7 por ciento de Almería) y especialmente si se compara con el 2,2% que refleja la situación de los niños y chavales de Álava. De hecho, el porcentaje de Huelva se enmarca en el máximo nivel anteriormente referido.

Volviendo a los adultos, la población con obesidad de España que despunta en el conjunto es La Coruña, con un 27,3 por ciento; seguida muy de cerca por Badajoz y un 27% de sus censados en términos de este sobrepeso extremo.

Andalucía se mueve en franjas más intermedias, volviendo a destacar Almería a la baja con un 19,9 (se ve, por tanto, que el problema de este rincón andaluz es más el sobrepeso que la obesidad). El cenit de la estadística sureña lo vuelve a encarnar Córdoba, con un 23,2 por ciento ponderal, aunque casi comparte situación con Sevilla (23,1%).

Todos los datos recogidos hasta ahora hacen referencia al promedio de los adultos. Sin embargo, el vistazo por sexos coloca tras el principal porcentaje de las prevalencias nacionales a los hombres: un 44,3 por ciento frente al 30,4 por ciento femenino (en sobrepeso) y un 19,3 por ciento frente al 18 por ciento (en obesidad).

Esta tendencia se evidencia desde las edades más tempranas. Los niños españoles tienen una prevalencia del 20,3 por ciento en sobrepeso frente al 18,1 %, una distancia que se recrudece en términos de obesidad (un 13,4 por ciento de los niños, casi el doble del 7,9 por ciento que se recoge en el caso femenino).

Dentro de Andalucía hay contraposiciones llamativas como la prevalencia del 30,5 por ciento en obesidad de los onubenses menores de edad (frente al 12,9% de las niñas y adolescentes) o del 18,1 en lo que respecta a los niños y adolescentes malagueños, que tienen en el sexo femenino un 7,6 por ciento. Pero también sucede a la inversa: las niñas de Granada tienen una mayor prevalencia en obesidad que los niños: 14,2% y 9,6%, respectivamente. Una excepción que refuerza la situación global de España en estos términos de exceso que lastra el horizonte saludable de la población.

Pueden consultar el estudio de adultos al detalle en este enlace.